Piel blanquísima, ojos grandes y redondos color marrón, labios carnosos y modales refinados, así describieron a Diana Espinoza Aguilar. La mujer por la que Rafael Caro Quintero, “El Narco de Narcos” se alejó de la delincuencia o al menos lo intentó.
Diana Espinoza o Altagracia Espinoza es originaria de Matachí, Chihuhua. En el año 2008 la detuvieron junto con su entonces pareja, Ever Villafaña, un capo colombiano, por operaciones con dinero de procedencia ilícita, portación de armas y delincuencia organizada.
En ese entonces, ambos ingresaron al penal de Puente Grande, en Jalisco. Donde tiempo después Diana conoció a Caro Quintero, uno de los fundadores del Cártel de Guadalajara.
Supuestamente, el narcotraficante vio por primera vez a Espinoza Aguilar en 2010 cuando fue coronada reina de belleza en el penal donde ambos estaban recluidos.
Por su parte, Quintero purgaba una pena de 40 años por el asesinato del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar en 1985, quien también era conocido como el “Kiki Camarena”.
Hace cuatro meses, el 15 de julio, en un operativo realizado por La Marina en el estado de Sinaloa detuvieron al “Narco de Narcos”.
El romance de Diana Espinoza Aguilar y el narco más famoso de México
La exreina de belleza confesó en 2016 en una entrevista para la periodista Anabel Hernández, que conoció a Rafael porque una amiga los presentó. A propósito, esa amiga era conductora de televisión de un programa de música grupera y se encargaba de llevar grupos musicales a las prisiones.
Ella fue quien nos dijo véanse, si están solos los dos, ¿Por qué no hablan? (…) él le preguntó (Rafael Caro Quintero) a esta chica por mi. Ella nos presentó y fue como empezó a crecer esta relación, este sentimiento. Él estaba solo y yo igual”, explicó la mujer.
Luego de cumplir su condena, Diana Espioza Aguilar salió de prisión en 2011. Sin Embargo, siguió en contacto con el afamado narcotraficante. En el 2013 cuando todavía le restaban 12 años de condena lo liberaron por un error en su proceso.
Lo primero que Caro Quintero hizo al salir de la cárcel fue viajar a Guadalajara para conocer a su hijo Agustín. Por fin, Diana y Rafael comenzarían a vivir juntos y empezarían de cero alejados del tráfico de drogas y de la delincuencia. Tenían planes de formar una familia y ver crecer a sus hijos.
Al contrario de sus planes, las cosas salieron diferentes. Pues meses después las autoridades mexicanas ordenaron su recaptura. Ya que el Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó al fundador del extinto Cártel de Guadalajara de traficar drogas de 1980 a 2018.
A todo esto, Diana Espinoza Aguilar desmintió las acusaciones del gobierno estadounidense contra su esposo. Aseguró que desde que lo liberaron, este se alejó del mundo del Narcotráfico.
Pero, las acusaciones no solo iban dirigidas contra Caro Quintero. El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos también acusó a la exreina de belleza de convertirse en la mano derecha del narcotraficante. Sin embargo, Diana negó estas acusaciones y dijo en la misma entrevista del 2016 que todo se trataba de una mentira.
Es una mentira falsa. Profundamente falsa. Nunca me he dedicado al narcotráfico. (…) Fui detenida por operaciones de procedencia ilícita, portación de armas y delincuencia organizada.
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