En la capital de Puebla, Tehuacán y San Martín Texmelucan se llevará a cabo la marcha contra el Plan B de la reforma electoral, el próximo domingo 26 de febrero.
En rueda de prensa, miembros de asociaciones civiles invitaron a la ciudadanía a participar en la marcha en la capital del estado.
La cita es el próximo domingo 26 de febrero a las 11 horas en el zócalo. Mientras que en Tehuacán será a la misma hora en el Parque Juárez.
En San Martín Texmelucan la convocatoria es de igual forma a las 11 horas en el zócalo del municipio.
Esta movilización llevará el nombre de “Mi voto no se toca” y es convocada por Unidos y Sí por México, así como otras organizaciones.
A nivel nacional se espera que de manera simultánea 75 ciudades se unan a la movilización. Adriana Flores, miembro de Quinientocracia indicó que esperan superar los millares de personas en Puebla.
Luego de que el pasado 13 de noviembre también se convocara a una marcha contra la reforma electoral impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Gracias a esta contundente fuerza se logró evitar la reforma constitucional que desaparecería al INE tal y como lo conocemos”, dijo Adriana Flores.
Recordar que el pasado 6 de diciembre en la Cámara de Diputados rechazaron la reforma electoral que proponía modificaciones a la Constitución Política de México.
En respuesta, legisladores de Morena presentaron el llamado “Plan B” de la reforma, en la cual se plantean modificaciones a leyes secundarias.
Al respecto, los organizadores de la movilización del 26 de febrero en Puebla señalaron que estos “cambios hechos al vapor” “lesionan gravemente” la democracia.
Piden vestir de rosa y blanco a asistentes a la marcha Plan B reforma electoral en Puebla
Cabe señalar que los convocantes pidieron a los asistentes a la marcha acudir con ropa blanca y rosa.
De acuerdo al Instituto Nacional Electoral (INE), el Plan B eliminará las 300 Juntas Ejecutivas Distritales (JED), encargadas de realizar el trabajo sustantivo para las elecciones.
Lo anterior implicaría una reducción del Servicio Profesional Electoral Nacional (SPEN) equivalente al 84.6%.
En su lugar se crearía una Oficina Auxiliar ocupada por una sola persona que tendría bajo su responsabilidad todas las tareas legales.
Además, suprimiría la Junta General Ejecutiva del INE, para sustituirla por una Comisión de Administración integrada por cinco consejeros electorales.
