Dos días después del hallazgo de cinco cuerpos con signos de violencia, cuatro hombres y una mujer, ministeriales y delincuentes se enfrentaron en el municipio de Libres.

Luego de que ministeriales y delincuentes se enfrentaron en el municipio de Libres, el saldo fue: dos heridos y cuatro detenidos. Sin embargo, hasta el momento la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) no ha compartido información oficial.

El ataque armado ocurrió sobre la carretera federal Amozoc-Nautla a la altura del barrio de Guadalupe. Exactamente frente a la gasolinera Mobil.

Los presuntos delincuentes se trasladaban en una camioneta y un vehículo particular, cuyas características no se dieron a conocer. Trascendió que también un motociclista llegó al lugar para agredir a los agentes, pero logró ser detenido.

Presuntos delincuentes en una camioneta. credit: Amauri Jiménez

De acuerdo con información proporcionada por vecinos, la persecución inició en la zona del Calvario, cerca de la telesecundaria “Rodolfo Neri Vela”.

La fuerte movilización y las detonaciones de armas de fuego alarmaron a los pobladores de este municipio. Por seguridad, las actividades deportivas que se desarrollan en instalaciones municipales se suspendieron. Esto con el fin de evitar que los menores de edad quedaran entre el fuego cruzado.

Los reportes señalan que dos personas resultaron heridas; paramédicos del SUMA las atendieron y trasladaron a un nosocomio de la zona.

Otras cuatro personas fueron detenidas. La presencia policiaca se extendió a Oriental y aquí también la población se alertó.

¿Qué ocurre en el municipio de Libres?

Recientemente cinco personas fueron torturadas y ejecutadas en Libres. Los cuerpos se localizaron el pasado 13 de febrero a un costado de la carretera que pasa sobre la comunidad de Ayehualaco.

Uno de los cuerpos correspondía a María Angélica Hernández Díaz, de 22 años, quien desapareció el 9 de febrero al salir de su trabajo.

El otro a Ricardo Alcándara Ríos, de 27, también reportado como desaparecido el 9 de febrero.

Los otros tres cuerpos eran de los hermanos Miguel, Joaquín y Félix Bonilla Salazar de 38 y 32 años de edad, conocidos como “Los Pelones”, banda delictiva que operaba en dicho municipio.

El gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes, declaró que algunas de las víctimas tenían antecedentes penales.

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