El Congreso de Puebla aprobó la Ley de Movilidad y Seguridad Vial para prevenir más muertes viales. Activistas y legisladoras llamaron a este nuevo documento “Ley Manu”, para recordar a Emanuel Vara Zenteno, víctima mortal de un siniestro en 2018.
Por unanimidad, el Congreso de Puebla cumplió con la obligación de armonizar la legislación local con la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial. Ésta fue propuesta por la diputada Lupita Leal.
Esta ley será el eje de las políticas públicas en materia de movilidad, dictará la planeación, organización, regulación y gestión de los gobiernos municipales y el estatal.
Deberán ponderar a los peatones, personas usuarias de la bicicleta y al transporte público mediante la llamada “pirámide de la movilidad”.
El Congreso aprobó la también llamada “Ley Manu” después de realizar cuatro foros y consultas ciudadanas a personas con discapacidad. En ellos hubo un total de 874 participantes, quienes emitieron 556 opiniones y aportaciones.
La diputada presidenta de la Comisión de Movilidad y Transporte, Silvia Tanús Osorio, explicó que esta ley busca garantizar el derecho a la movilidad. Lo anterior, con seguridad, accesibilidad, sostenibilidad e inclusión.
Además, reconoce que las calles deben ser para el disfrute y uso social. Establece la creación de un Fondo Especial para Proyectos de Movilidad.
Establece que las sanciones tienen que ser proporcionales a los riesgos inherentes a cada modo de movilidad”, comentó.
Esta nueva ley implementa vías recreativas donde se prohíbe temporalmente la circulación de vehículos motorizados, a fin de que las personas puedan caminar o andar en bici.
La diputada Lupital Leal Rodríguez explicó que con este ordenamiento se decreta que los límites de velocidad en las ciudades son de 30, 50 y 80 kilómetros por hora.
Es una proclamación de esta generación de hacia dónde queremos ir, hacia ciudades más humanas, para las personas, ya no más para las máquinas, ciudades seguras ante la fragilidad del cuerpo humano y no de un robot”, dijo.
Señaló que el derecho a la movilidad abre la puerta a otros derechos como el de la educación. El siguiente paso es que los ayuntamientos armonicen sus reglamentos.
