No es un mito. El llamado “Niño sicario de Xilotzingo” sí existe. Se trata de un adolescente de 13 años al que ya detuvieron en tres ocasiones por delitos contra la salud, robo a casa habitación y a transeúnte.
Su detención más reciente ocurrió el pasado 5 de septiembre y estuvo a disposición del Ministerio Público. No obstante, el Sistema de Justicia Penal para Adolescentes lo protege. Gracias a esto ha librado la prisión —internamiento—.
El fiscal especializado en Derechos Humanos de Puebla, Ulises Sandal Ramos Koprivitza, explicó que su primera detención fue en julio de 2022. Se metió a robar a una casa, pero el caso se resolvió por medio de mecanismos alternativos de resolución de controversia con un acuerdo reparatorio.
Unos meses después, en octubre, policías municipales lo dejaron a disposición de la Fiscalía por asaltar a un transeúnte. Sin embargo, en esa ocasión se determinó el no ejercicio de la acción penal, es decir, no procedieron en su contra.
Detención reciente del Niño Sicario de Xilotzingo, por droga
El pasado 5 de septiembre, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de Puebla lo volvió a detener. Ahora, por posesión de droga y por posesión de objeto prohibido.
El fiscal ya dijo que, pese a esto, el menor de edad no llegará al Centro de Internamiento Especializado para Adolescentes (Ciepa). La ley establece tres grupos etarios: el primero, de 12 a 14 años; el segundo de 14 a 16 años y el tercero de 16 y hasta antes de los 18 años. Cada uno de ellos tiene aplicaciones jurídicas distintas, pero en la mayoría de los casos se prevé su inmediata liberación y acompañamiento familiar.
Así hayan participado en delitos graves como homicidios, secuestro o feminicidio, la pena máxima que se ha logrado es de 5 años de cárcel.
El fiscal general, Gilberto Higuera Bernal, indicó que se trata de un niño abandonado y descuidado por su familia. Por ello, ya solicitó la intervención del DIF.